Home / Realidad  / Dispositivos digitales en el trabajo y su impacto en la vida cotidiana

Dispositivos digitales en el trabajo y su impacto en la vida cotidiana

Los cambios tecnológicos que se presentan actualmente han impacto todos los ámbitos de la vida, sin excluir nuestro trabajo. En ocasiones, de manera positiva al permitir que se proteja la vida y la salud de las personas evitando la realización de trabajos peligroso o repetitivos, que ahora están automatizados. Se han disminuido las distancias y los tiempos de respuesta en un ambiente laboral globalizado, flexibilizando cada vez más el lugar y los horarios de trabajo. Las nuevas prácticas como el teletrabajo traen consigo grandes ventajas como reducir el tiempo y el estrés de los traslados o el riesgo de sufrir accidentes del trabajo.

 

Pero este avance ha empezado a tomarnos ventaja, incluso la OIT en su informe Seguridad y Salud en el centro del futuro del trabajo, publicado en Abril 2019, evidencia el impacto que ha tenido la ‘virtualización’ del trabajo, cambiando el modo de interactuar de las personas en el trabajo (y, de hecho, también en casa), el desarrollo y la generalización de la digitalización y las TIC están desdibujando la línea divisoria entre el trabajo y la vida personal.

 

Ahora se tienen horarios extensos, ya no en la oficina sino en nuestra casa, exigiendo disponibilidad digital constante, entrega de información al instante, comunicación sin horarios para responder a las sedes ubicadas en otros países y con otros horarios. Sentir que podemos estar con nuestra familia porque trabajamos desde casa pero sin darnos cuenta que se está más conectado al dispositivo que a nuestros seres queridos.

 

Byung Chul Han, en su libro, La sociedad del cansancio, afirma que esta sociedad se convirtió en la del rendimiento, donde la gente rinde sin rendir, el exceso de trabajo, el vivir para trabajar, el estar conectados digitalmente todo el día afectan los vínculos, afectan las horas de sueño. Y no solo el impacto llega a la cotidianidad sino que puede ser la puerta de entrada a afectaciones emocionales más graves como estrés o ansiedad, porque la necesidad de responder al instante nos lleva a una adicción digital de nuestro trabajo, disfrazada de responsabilidad, que afecta la salud física y emocional. Sin darnos cuenta el trabajador se vuelve víctima de ciberacoso laboral por parte de la empresa.

 

Con el nuevo auge de la prevención de riesgos psicosociales en las organizaciones, se debe tener en cuenta, en las políticas de bienestar y en la identificación de los riesgos, la manera en que se controla y equilibra el uso de herramientas digitales y la vida de los trabajadores. No es un llamado solo al empleado por proteger su salud mental sino una obligación y responsabilidad de las empresas, para que desde sus políticas controlen y establezcan reglas claras y límites en el uso de aplicaciones, como Whatssapp, Telegram o similares, desde horarios, tipo de información compartida, usos y objetivos de los grupos o conversaciones. Entendiendo que si la empresa entrega al trabajador un celular o un plan de datos, no es para estar conectados con el trabajo de manera permanente sino como una herramienta de comunicación que tiene límites.

 

Las empresas no deben minimizar la importancia de las actividades sociales y de vida personal que tienen sus trabajadores, por el contrario, deben promover dichos espacios porque son un factor protector de la salud mental y un instrumento indispensable para mantener un equilibrio entre el trabajo y el ocio.

 

Escrito por: Milena Jaimes Salazar

Psicóloga, especialista en sistemas integrados de gestión QHSE

Correo: cmjaimes77@gmail.com

Linkedin