En México suceden un promedio de 127 mil casos de quemaduras al año, de los cuales, alrededor de 13 mil requieren hospitalización por quemaduras severas. Aún considerando estos número, el país sólo cuenta con un Centro Nacional de Atención para Quemados (inaugurado en 2011) y 20 unidades médicas de atención especializada en 13 estados de la República. La causa de los elevados precios de la atención privada, los pocos médicos y profesionales de la salud capacitados para atender quemaduras y la alta tasa de accidentes provocan que la mayoría de casos de quemaduras severas no reciba atención médica adecuada.

Hoy en día, las personas que sufren quemadura de más del 90% de la superficie de su cuerpo pueden sobrevivir dado que el tratamiento de las quemaduras ha tenido grandes avances en los últimos años permitiendo una gran reducción de la mortalidad y una restauración funcional y cosmética. Esto permite que se logre una rehabilitación integral con incorporación a la vida social, escolar y laboral.

También es importante hacer notar que la población económicamente más vulnerable es la que se ve afectada en mayor escala. Por este motivo, surge la necesidad de que existan servicios especializados de alta calidad, que garanticen la preservación de la vida, la mejor y más completa recuperación y rehabilitación de los pacientes quemados.  En México, los altos costos para la atención y el tratamiento son una barrera para una completa y sana recuperación. Estos factores son los principales problemas a los que se enfrenta el paciente quemado y su familia, lo cual provoca que en muchas ocasiones, se deje en el olvido su tratamiento o no se atienda inmediatamente con lo que se generan mayores daños y graves secuelas en el menor.

El desconocimiento sobre las reglas básicas de prevención en los hogares y los escasos programas institucionales para capacitar a la población suma mayores posibilidades de incidentes.  Asimismo, la poca capacitación especializada en la atención de las quemaduras genera que no todos los profesionales de la salud brinden un manejo inicial y tratamientos de continuidad adecuados. Si todos tuvieran la obligatoriedad en sus planes de estudio de profundizar en el tratamiento de quemaduras, las recuperaciones podrían ser en menor tiempo y con secuelas menores.

No hay dolor más grande que las quemaduras de los niños. Por eso en caso de emergencias, llama a QUEMATEL (01 800 080 8182), las 24 horas del día, los 365 días del año. Es totalmente gratuito y te dirán qué hacer y cómo actuar en caso de que el más mínimo descuido se convierta en la peor realidad.

Escrito por Fundación Michou y Mau y Social Value Institute 

Desde 1998, la Fundación Michou y Mau para niños quemados se dedica:

–  Al traslado de niños en riesgo de perder la vida por quemaduras al Hospital de Shriners Galveston o a las unidades especializadas en México.

– A la atención de niños con secuelas de quemaduras a través de diferentes apoyos como: revisiones médicas subsecuentes en clínicas de valoración que se dan en diferentes Estados, tratamiento psicológico para los pacientes y sus familias, ayuda para las prendas de presoterapia, traslados, alojamiento en albergues durante su estancia para las revisiones médicas, etc.

– A la creación de Unidades de Alta Especialidad en la Atención de Quemaduras en México

– La capacitación de profesionales de la salud: médicos, paramédicos, TUM, enfermeras, personal de rescate, etc.; para brindar atención especializada en quemaduras

– A prevenir a través de la Campaña Nacional de Prevención “No TQuemes” que cuenta con material audiovisual y didáctico para que aprendas con los más pequeños de la casa como no quemarse o qué hacer si tienen algún accidente que pueda provocar quemaduras 

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 Tu donativo nos puede ayudar a salvar una vida de un niño quemado. Haz tu donación aquí o puedes realizarla directamente en el banco Citibanamex en la cuenta Núm. 4153654 sucursal 298 a nombre de Fundación Michou y Mau I.A.P., clabe interbancaria 002180029841536548