Seguramente alguna vez te has preguntado si sería buena idea compensar tu huella de carbono al comprar el boleto de avión de tus vacaciones de fin de año. Si no lo has hecho, no te preocupes. La próxima vez que compres un boleto de avión recordarás este artículo porque verás la opción que te permita contrarrestar las emisiones emitidas por el avío.

Hasta aquí, todo bien. Sin embargo, ¿te has preguntado cuándo contamina ir todos los día en coche a tu trabajo? Como mexicana o mexicano, conocerás muy bien de conceptos como inversión térmica, puntos IMECAS, doble hoy no circula u otras cosas que nos dicen, cada vez que hay un emergencia ambiental, qué hacer y qué no hacer.

Ahora bien, ¿cuándo contamina lo que comes día a día? ¿Cuánto contamina la comida corrida godín del restaurante de la esquina o el cocido que llevas en el tupper al trabajo? La respuesta es tan sencilla como trágica.

Si comes una vez al día carne en un año (75 gramos, o lo equivale a una hamburguesa), es equivalente a conducir 11,581 km en tu coche. También es equivalente a volar ida y vuelta de México a Monterrey 9 veces. Tu consumo de carne al año (75 gramos al día por un año) requiere destinar 8,000 metros cuadrados exclusivamente para producir tu hamburguesa.

Lo que todos estos datos significan es que si quieres dar una vuelta al mundo (+40,000 km), solo requieres comer 3.6 hamburguesas al día  o lo que es lo mismo, 272.25 gramos de carne al día, para haber contaminado lo mismo. Si sumas el jamón de tu sandwich, los tacos al pastor después de la fiesta, el corte de carne que comes el viernes de celebración godín o el chicharrón de las quesadillas de la esquina, te aseguro que comes más de 272.25 gramos de carne al día por un año, es decir, contaminas lo mismo que si volaras alrededor de todo el planeta.

La triste realidad es que no necesitas viajar para contaminar. Lo puedes hacer desde tu casa y desde tu rutina. Está en ti el cambio en reducir la contaminación del mundo.

Consultora en Responsabilidad Social Empresarial