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Ni uno menos

Platicando con mi amiga Karime, mencioné lo frustrada y decepcionada que estaba al ver que algunos conocidos y amigos comparten publicaciones en redes sociales aferrándose a refutar la existencia del feminicidio, ridiculizando el término y buscando “hombricidios”. La violencia de género es un tema que al igual que mi amiga, pensaba que estábamos en la misma página como sociedad, ya que el feminicidio es un término que ha formado parte de nuestro pan de cada día en los medios de comunicación. Feminicidio se refiere a la muerte violenta de las mujeres por razones de género y se considera la representación más extrema de violencia hacia las mujeres. La escritora y activista Sudafricana Diana Russel acuñó el término con “el fin político de reconocer y visibilizar la discriminación, la opresión, la desigualdad y la violencia sistemática contra la mujer.” En el 2018 las Naciones Unidas exigieron al gobierno Mexicano que tipifiquen los feminicidios en todo el país para clasificarse correctamente ya que tenemos que entender como sociedad que no todos los homicidios hacia las mujeres son considerados feminicidios.

 

Para determinar un feminicidio de un homicidio se consideran: los contextos y escenarios, el sujeto activo, sujeto pasivo, las formas de violencia para ejecutar el delito y las manifestaciones de violencia contra la mujer anteriores al feminicidios. El artículo 325 del Código Penal Federal establece las siguientes 7 razones de género, considerando las antes mencionadas.

 

  1. La víctima presente signos de violencia sexual de cualquier tipo
  2. A la víctima se le hayan infligido lesiones o mutilaciones infamantes o degradantes, previas o posteriores a la privación de la vida o actos de necrofilia
  3. Existan antecedentes o datos de cualquier tipo de violencia en el ámbito familiar, laboral o escolar, del sujeto activo en contra de la víctima
  4. Haya existido entre el activo y la víctima una relación sentimental, afectiva o de confianza
  5. Existan datos que establezcan que hubo amenazas relacionadas con el hecho delictuoso, acoso o lesiones del sujeto activo en contra de la víctima;
  6. La víctima haya sido incomunicada, cualquiera que sea el tiempo previo a la privación de la vida;
  7. El cuerpo de la víctima sea expuesto o exhibido en un lugar público.

 

“Entre 2014 y 2017 unas 8.904 mujeres han sido asesinadas en México, sin embargo, solo un 30% de los casos fue investigado bajo los protocolos del feminicidio.”

 

En México no se conocen realmente los datos de nuestra alarmante situación debido a que solamente 19 estados tienen la tipificación adecuada. Los países latinoamericanos han captado la atención internacional al demostrar altos índices y patrones de desigualdad y violencia de género. Por ello, sigo sin comprender el empeño a negar todo esto y quisiera saber, ¿por qué les molesta tanto que queramos usar y conocer el término para cumplir con su fin político? ¿Por qué estás en contra de que le exijamos al gobierno y a las autoridades mexicanas adoptar medidas para prevenir, registrar y juzgar esta manifestación de violencia contra las mujeres?

 

Nos están matando y al ignorar, ridiculizar y tratar de refutar el feminicidio o decir “¡Ni uno menos!” formas parte de la violencia de género.

 

Escrito por María Fernanda de la Garza

Especialista en Responsabilidad Social Empresarial