Ser ecológico es realmente fácil. Creemos que no pero nos equivocamos. Y no tenemos que cambiar grandes cosas de nuestras vidas para serlo. No hay que hacer drásticos cambios en la vida para poder decir: «contribuyo en algo para mejorar este mundo». Aquí te dejamos 3 cosas que puedes hacer desde hoy para ser más ecológico, o por lo menos, para evitar destruir tan rápido este planeta que le dejaremos a nuestros hijos.

1. El agua y el aceite no se llevan. Suena cliché pero es muy cierto cuando hablamos de temas ecológicos. Si tiramos un litro de aceite al agua, estamos contaminando un millón de litros de agua. Tirar aceite de cocina a la tarja o aceite sobrante de latas de atún o sardinas o simplemente lavar sartenes y ollas de freír directamente bajo el grifo ocasiona graves problemas de contaminación de agua. Guarda el aceite de freír, como tantas veces han hecho nuestras madres, y deposítalo en lugares hechos para ello. A menos que comas papás fritas homemade todos los días, tardarás bastante en llenar un contenedor para no tener que ir diario a estos lugares. Si usas mucho mucho mucho aceite, hay empresas que compran tu aceite y grasa animal. Hasta negocio puedes hacer de ello.
2. Cambia al mundo digital y evita imprimir documentos. Aun para cuando compras papel reciclado, se utiliza para su producción pulpa de papel pura que hace que se sigan destruyendo millones de árboles por el puro gusto de tener documentos en papel. Cambia al mundo de la nube, de los pases de abordar en el teléfono, de las facturas en pdf y mil otras cosas para evitar que acabemos con nuestros aliados más grandes en la producción de oxígeno. Es algo tan fácil y mucho más barato que estar comprando tinta o toner para tu impresora. Si en tu negocio o empresa siguen imprimiendo correos electrónicos, quiere decir que hace falta una buena sacudida a toda la institución para traerla, por lo menos, al año 2000. Logrado esto, el siguiente reto será lograr traerla al 2016.
3. Carne es sinónimo de calentamiento global. Cuando uno pregunta en México a cualquier persona si ésta come mucha carne o si come carne diario, normalmente quien responde tiene en mente que de lo que se habla es carne roja, sobre todo, filetes y cortes especiales. Se olvida muy comúnmente que cualquier sandwich, torta o quesadilla lleva jamón, tocino, etc., la cual también es carne, y se consume diariamente. Y no se trata de que ciegamente todo el mundo se haga vegetariano. Se trata de reducir el consumo de carne en nuestras dietas. Un pequeño cambio puede realmente hacer un cambio en el planeta. Nunca ha sido saludable comer carne 7 días a la semana. ¿Por qué seguir haciéndolo? Reduce un poco la carne, un poco la leche o un poco el queso. Que no todo tu menú esté sazonado con chorizo es bueno para el mundo. Todo cambio contribuye de manera muy positiva. Y puede ser que hasta termines gustando de los vegetales, las leguminosas y los carbohidratos como pastas y arroces.

También publicado en Entrepreneur